Especialistas del Centro de Estudios Superiores de Tepeaca en Puebla, han logrado cicatrizar heridas de pie diabético mediante la aplicación de miel virgen y un parche hecho de la cera de la colmena.
“Un alumno de la sierra de Puebla nos habló de las bondades de la miel, porque su familia se dedica a recolectarla, y él tuvo contacto con las abejas desde los cinco años. Nos trasmitió su experiencia, trajo la miel y los estudiantes la sometieron a estudios bacteriológicos, la cultivaron y resultó que era una miel virgen con propiedades curativas”, explica el doctor Armando Acevedo Méndez, cirujano traumatólogo ortopedista e investigador de dicho centro de estudio.
Con dicha sustancia hicieron un parche que pueden moldear a la medida de la herida. Primero desinfectan la herida, ponen la miel, después el parche y lo cubren con una tela que se llama organdí, con ese parche los pacientes mejoraron las condiciones de cicatrización, se disminuye la carga bacteriana de la herida.
En un primer grupo de 15 pacientes que recibieron el tratamiento que dura de 14 a 21 días, las heridas de seis personas cicatrizaron en su totalidad; una paciente adulto mayor desertó porque no hubo nadie que lo llevara a las curaciones, y los ocho restantes continuaron con el proceso del parche y han tenido mejoría.
“Cada proceso lo tenemos registrado en expedientes clínicos. Como los resultados han sido favorables, decidimos participar en el Premio Nacional Innovación Tecnológica para la Inclusión Social INNOVATIS en la rama de salud, y de 196 trabajos quedamos en sexto lugar. El galardón lo patrocinó CONACYT, CIDE, UAM y SEDESOL”, indica Acevedo Méndez.
La idea de curar con miel de abeja nació en el Centro de Estudios Superiores de Tepeaca en Puebla, donde un grupo de alumnos se dedicaron a estudiar los problemas de salud que detona la diabetes y que en ese estado la padecen más de 90 mil personas, platica el doctor.
El también director de la Unidad Avanzada de Heridas de los Servicios Médicos de San Baltazar, agrega que comenzaron a curar con la miel, incluso el tratamiento ha sido benéfico en pacientes a quienes les iban amputar su pie, porque la herida se había infectado y no había otra opción.
El especialista comenta que el tratamiento no es costoso, es menor de cien pesos por paciente, porque la miel la donó la familia del estudiante, y ambas instituciones (el hospital y la escuela) asumen los gastos menores que es hacer los parches, la tela y la entrega de antibiótico, y los alumnos hacen los parches como parte de su formación, y por gusto.
Por eso el tratamiento y los medicamentos son gratuitos, y las personas que requieran el tratamiento pueden ir los sábados a la Unidad Avanzada de Heridas de los Servicios Médicos de San Baltazar, y pueden hacer cita al 01 222 2818585.
“Lo que importa a los directivos de la escuela y hospital es que las personas tengan un tratamiento adecuado y gratuito, con el fin de no amputar miembros y que la persona siga valiéndose por sí misma. Ya lo patentamos y queremos que el producto sea cien por ciento poblano, por eso no se venderá a ningún laboratorio farmacéutico, queremos sea accesible a la población que carece de recursos y que por ello no sigue un tratamiento”, concluye Acevedo Méndez.
VCD