China
ha
blindado
su
estación
espacial
Tiangong
después
de
que
un
satélite
ruso
abandonado
se
desintegrara
en
más
de
100
fragmentos.
Seis
horas
y
media
de
trabajo
extravehicular.
Los
astronautas
Li
Cong
y
Ye
Guangfu,
de
la
misión
Shenzhou-18,
llevaron
a
cabo
una
caminata
espacial
de
seis
horas
y
media
para
instalar
dispositivos
protectores
en
el
exterior
de
la
estación
espacial
Tiangong.
Estos
paneles
están
diseñados
para
mitigar
los
riesgos
de
una
colisión
con
alguna
pieza
de
basura
espacial,
mejorando
la
seguridad
y
estabilidad
a
largo
plazo
de
la
estación
orbital
china,
publica
South
China
Morning
Post.
La
Estación
Espacial
Internacional
también
cuenta
con
paneles
balísticos
para
protegerla
de
fragmentos
de
satélites,
cohetes
y
pequeños
meteoroides.
A
28.000
km/h,
hasta
un
objeto
de
unos
pocos
centímetros
podría
tener
consecuencias
desastrosas
para
los
astronautas
que
viven
en
la
órbita
baja
terrestre.
Una
grúa
para
elevar
astronautas.
Durante
los
trabajos
extravehiculares,
el
astronauta
Li
Cong
era
remolcado
por
el
brazo
robótico
de
la
estación
Tiangong
hasta
los
puntos
donde
debía
instalar
los
dispositivos
protectores,
mientras
su
compañero
Ye
Guangfu
le
entregaba
el
equipo.
«Siempre
que
el
brazo
robótico
me
llevaba
a
puntos
altos,
no
podía
evitar
echar
un
vistazo,
a
pesar
del
deslumbrante
sol»,
dijo
Li,
que
tuvo
que
centrarse
en
los
módulos
Wentian
y
Tianhe.
Li
Guangu,
el
tercer
tripulante
de
la
nave
Shenzhou-18,
supervisaba
las
operaciones
desde
el
módulo
central
Tianhe
en
la
reluciente
estación
espacial
china.
La
caminata
transcurrió
sin
problemas.
Un
satélite
ruso
aceleró
las
cosas.
No
es
la
primera
vez
que
la
tripulación
de
Shenzhou-18
se
embarca
en
la
instalación
de
paneles
de
protección.
El
28
de
mayo
hicieron
una
caminata
espacial
récord
de
ocho
horas
y
media.
Sin
embargo,
la
reciente
explosión
en
órbita
del
satélite
ruso
Resurs-P1,
que
se
desintegró
en
más
de
100
fragmentos
rastreables
a
pesar
de
que
lleva
años
sin
comsutible,
ha
acelerado
la
instalación
de
protectores.
El
día
que
ocurrió
el
colapso
del
satélite
abandonado,
los
nueve
astronautas
de
la
Estación
Espacial
Internacional
tuvieron
que
refugiarse
de
inmediato
en
las
naves
espaciales
acopladas
a
la
estación:
cuatro
en
la
Crew
Dragon
de
SpaceX,
tres
en
la
Soyuz
rusa
y
dos
en
la
recién
estrenada
Starliner
de
Boeing.
Imagen
|
CNSA,
Xinhua
En
Xataka
|
La
nave
espacial
de
China
viene
con
instrucciones
impresas
en
inglés
y
chino.
Tiene
mucho
sentido