El jueves se llevó a cabo una audiencia en el juzgado Federal local en torno a la denominada banda del sulfito, la cual habría vendido durante años carne podrida o adulterada en San Francisco y Frontera.
En la misma, participaron ocho de los imputados, los cuales por medio del Dr. Lucas Agosti, habían solicitado permanecer en libertad mientras dure la investigación y se llegue a una definición en un eventual juicio. El pedido fue realizado por medio de un habeas corpus, el cual tuvo un fallo favorable del juez actuante, logrando de esta manera que los acusados continúen en libertad mientras dure el proceso judicial.
Hay que destacar que la audiencia fue encabezada por el Dr. Roque Ramón Rebak, juez Federal de Villa María, que remplazó al magistrado local Pablo Montesi, que se encontraría de licencia por compensación de feria, publica El Tiempo.
Del mismo modo, por el momento sobre los investigados no pesa ninguna imputación, dado que el Juez habría solicitado al Fiscal José María Viaut que justifique “mejor” las acusaciones que pretende realizar en torno al delito de “faenamiento clandestino, envenenamiento de alimentos y graves transgresiones a reglas de salud pública”, que también se especuló podía derivar en una asociación ilícita.
Según información recabada por este medio, los análisis y pericias realizados sobre la carne secuestrada arrojó resultados positivos. Se encontró sulfito en algunos casos, carne podrida en otros y en la gran mayoría que no se respetaba la cadena de frío. Es decir no había nada en buen estado de conservación.
Por otra parte, se investigó en todos los centros de salud privados y públicos de la región sobre si esta contaminación de la carne podría haber derivado en una muerte, pero por el momento no hubo resultados positivos en este punto, lo cual favorece a los acusados.
