Candela Francisco, la ajedrecista que pasará las fiestas jugando el Mundial de Qatar: «Me voy a llevar el pan dulce en la valija»

Está a la vista que el ajedrez no para de crecer en Argentina. Una nueva generación de jóvenes la está rompiendo en el plano internacional, con la irrupción de Faustino Oro en la rama masculina y el surgimiento de una estrella en la femenina: Candela Francisco, que con 17 años ya había ganado el Mundial Sub 20 y a sus 19 es la vigente campeona de América.

La talentosa joven, GM desde 2023, está por viajar a Qatar para disputar el Mundial de Rápidas y Blitz, que se realizará del 25 al 31 diciembre, y allí buscará alcanzar su próximo objetivo: morder la chapa en el campeonato del mundo de mayores. Antes de armar las valijas y partir para Asia, Cande recibió a Olé, habló del significado de este torneo, de lo mucho que cuesta financiar su carrera ( Emova es su auspiciante) y de la fecha en la que le tocó jugar. Lejos de todos, aunque con la compañía de su mamá, ya planificó: «Probablemente me lleve el pan dulce en la valija».

-¿Cómo te venís preparando para el Mundial?

-A full, es una oportunidad asombrosa y por eso me estoy entrenando lo máximo que puedo. Quiero llegar bien preparada y dejar a la Argentina en lo más alto posible. De más está decir que, si no fuera por Emova, sería imposible participar en este tipo de eventos que son muy costosos.

-Sin los sponsors, imagino que la carrera de una ajedrecista se vuelve difícil de llevar desde lo económico…

-Sí, sin duda. Tengo la fortuna de que me acompañen desde hace dos años así y puedo representar al país. Ojalá que el año que viene sigamos juntos.

-Vas a participar en las dos modalidades del Mundial: ¿es distinto el entrenamiento de rápidas y el de blitz?

-Voy a jugar ambas modalidades, pero sobre todo me encanta blitz. Creo que ahí toma protagonismo la intuición, los golpes de vista… es fascinante, las tácticas se ven bien reflejadas. Sobre la preparación, lo esencial es llegar bien en aperturas. Después, hay que mantener la tranquilidad en cada partida y que se dé lo que se tenga que dar, ja.

-Más allá de las diferencias en los formatos, ¿qué cambia entre ambas modalidades para una experta?

-Son muy distintos los ritmos de juego, y cambia la toma de decisiones. Blitz es mucho más intenso (3 minutos en el reloj), hacés la primera jugada confiando mucho en tu instinto, y en rápidas baja la intensidad (15 minutos en el reloj) y te permite pensar mejor las ideas, elaborarlas y formar una estrategia más compleja.

-Alguna vez dijiste que tu meta era ser campeona del mundo de mayores. ¿Será este el año?

– Sería una súper bendición, pero solo Dios lo sabe. De mi parte queda seguir con mi preparación, estudiar y dar lo mejor que tengo. Ojalá se dé…

-¿Tiene un gustito especial que sea en Qatar, donde alguna vez Argentina salió campeona?

-No le doy tanta importancia al lugar, pero sería muy lindo . Es un destino bastante lejano, pero ya hice alguna vez viajes de alrededor de dos días. Este se suma a la lista.

-Las fechas del Mundial también son bastantes peculiares, te agarra justo en las Fiestas…

-Es una experiencia totalmente nueva, realmente no sé cómo va a ser. Le contaba recién a uno de los chicos que probablemente me lleve el pan dulce en la valija, no me queda otra, ja. Gracias a Dios me voy con mi mamá, así que lo vamos a festejar allá. Soy cristiana, así que no quiero dejar pasar la oportunidad de celebrar.

-¿Cambió algo en el mundo del ajedrez nacional tras la irrupción de Faustino Oro?

– Es un gran jugador y un prodigio argentino, sin duda alguna. Esta nueva generación de chicos promueve el deporte, hace que mucha más gente se acerque y deja a la bandera argentina en lo más alto. Desde mi posición, me toca acompañarlo y apoyarlo, vamos todos juntos para adelante.

-¿Alguna vez jugaste contra él?

-Sí, lo conozco y he jugado contra él en múltiples ocasiones. Tenemos el historial empatado ahora, justo jugamos la semana pasada y él lo igualó. Es un gran chico, con mucho potencial. Ahora tiene que seguir disfrutando del juego.

-¿Qué actividades hacés cuando tenes que relajarte un rato del ajedrez?

-Este año empecé a estudiar derecho en la universidad, así que podríamos decir que tengo otro ámbito de estudio ahora. Todos los fines de semana voy a la iglesia, tengo mi grupo de amigos de ahí, que compartimos la fe y cosas en común. Disfruto mucho los juegos de mesa, pasar tiempo con mi familia y muchos años hice tenis, ahora dejé pero en algun momento voy a volver…

-¿Te permitís disfrutar cuando estás compitiendo o se sufren los torneos?

-Es algo que uno va aprendiendo, pero creo que si no disfrutas de lo que haces, es mejor no hacerlo. No hay que perder nunca eso que tiene uno de niño, hacer las cosas porque nos gustan y nos divierten. Por suerte sí, disfruto cada torneo, cada partida, no siento presión por salir a ganar o cumplir algún objetivo. Se trata simplemente de dar lo mejor de uno…

-Dame la clave para ser una buena ajedrecista.

-Sin duda muchos valores, como la responsabilidad, la disciplina, la perseverancia… Y sobretodo la paciencia. En cualquier ámbito de la vida, uno quiere ver los resultados rápido, pero no es así como se suelen dar las cosas. Lo importante es todos los días aportar un granito de arena, poner todo tu esfuerzo, y a la larga se logran los objetivos.