Hay un colectivo bastante numeroso de autónomos que están encuadrados dentro del sistema de estimación objetiva, también conocido como módulos para pagar sus impuestos. En este caso, pagan en función de unos beneficios estimados según los recursos disponibles que tienen para realizar su actividad, que se calculan según los parámetros que cada año publica la Agencia Tributaria. Y esto simplifica cómo se calcula la cotización por ingresos reales para los autónomos que tributan por módulos.
Porque en este caso no importa realmente cuanto están ganando, sino cuánto se estima que pueden ganar. Es decir, es una cantidad fija, lo que va a determinar cuánto tienen que cotizar. Para calcular cuanto tienen que pagar hay que acudir al rendimiento neto previo.
Un sistema de módulos que puede cambiar a final de año
Para ello se tienen que aplicar determinados coeficientes en función de la actividad, los metros cuadrados del local, consumo eléctrico o el número de trabajadores empleados, por ejemplo. Una vez obtenida dicha cantidad anual tendrá que dividirla entre doce para saber en qué horquilla se encuadra y cuánto tendrá que pagar.
En general, lo más probable es que acaben pagando más que actualmente si estaban cotizando por la base mínima, dado que la mayor parte de los autónomos que pueden elegir tributar por módulos es porque tienen una fórmula más favorable para la cantidad de ingresos que generan, que suele estar por encima del SMI.
Los autónomos que tributan en módulos no podrán reducirse un 7% de gastos de difícil justificación, como si lo hacen aquellos que tributan por estimación directa. Se entiende que al no hacer una contabilidad tan precisa de sus ingresos, dichos gastos ya están contemplados según los coeficientes de módulos activados.
Por último habrá que estar muy atentos a finales de año para ver si se mantienen o no los límites de módulos, que llevan varios años congelados y tienen que pegar una bajada importante. Esto dejaría fuera de este sistema a una gran parte de los que actualmente tributan por estimación objetiva.
Lo que no tiene ningún sentido es que se esté contemplando ya la obligación de la facturación electrónica para los autónomos, pero se mantenga el sistema de módulos como un reducto del pasado con una bolsa de empresas bajo este modelo demasiado amplia.
