Antonio
Rubio
se
asfixiaba
cada
vez
que
tenía
que
subir
tres
pisos
sin
ascensor
cuando
pesaba
120
kilos
y
poco
tiempo
después
estaba
compitiendo
en
algunas
de
las
carreras
de
obstáculos
(OCR)
más
duras
del
mundo,
proclamándose
varias
veces
Campeón
de
España
en
su
categoría.
A
continuación
describimos
una
de
las
historias
de
motivación
que
demuestran
que
con
paciencia
y
perseverancia
se
pueden
lograr
metas
que
un
día
parecían
inalcanzables.
De
pesar
120
kilos
y
sufrir
por
subir
escaleras
a
ser
Campeón
de
España
Cada
vez
que
digas ‘no,
si
por
un
día
no
pasa
nada’
coges
una
libreta
y
haces
una
raya.
Te
sorprenderás
que
al
final
de
la
semana
habrás
dicho ‘no
pasa
nada’
16
veces.
Así
comienza
la
interesante
entrevista
que
hicieron
a
Antonio
Rubio
desde
el
canal
de
YouTube
de
Hijos
de
la
Resistencia.
El
emeritense
ha
luchado
contra
su
físico
y
su
cabeza
en
carreras
internacionales
tan
duras
como
la
Ultra
Viking,
que
consta
de
60
km,
3.300
metros
de
desnivel
y
140
obstáculos
o
en
el
Campeonato
del
Mundo
de
Londres
de
2019
en
el
que
tuvo
que
enfrentarse
a
la
dureza
de
la
prueba
y
a
las
condiciones
climatológicas
adversas.
Desde
entonces
no
ha
dejado
de
mejorar
más
y
más,
llegando
a
ser
el
primer
español
en
completar
en
el
mismo
fin
de
semana
la
Iron
Viking
(42km
y
100
obstáculos)
y
la
Ultra
Viking
(60
km
y
135
obstáculos).
Un
total
de
102
km
y
235
obstáculos
en
14
horas
y
14
minutos.
«Me
cambió
la
vida
este
deporte»
En
una
entrevista
para
Televisión
Extremeña,
Antonio
explicaba
que
las
carreras
de
obstáculos
le
cambiaron
la
vida.
Gracias
a
ello
no
solamente
mejoró
su
composición
corporal
y
su
salud,
sino
que
también
comenzaron
a
formar
parte
de
su
vida
personal.
Lejos
de
lo
que
suele
ser
el
motivo
principal
por
el
que
se
comienza
a
hacer
ejercicio
físico,
la
estética
no
era
objetivo
por
entonces,
ni
lo
es
ahora,
ni
lo
será
para
el
extremeño.
Su
motivo
principal
era
eliminar
las
limitaciones
que
le
suponían
su
peso
de
120
kg
con
20
años.
Entrevista
a
Antonio
Rubio
Primera
carrera
de
Antonio
siendo
ayudado
por
una
persona
desde
abajo
(izquierda)
versus
última
carrera
de
Antonio
(derecha)
–
Imágenes
cedidas
por
Antonio
Rubio
La
historia
de
superación
de
Antonio
nos
llevó
a
contactar
con
él
y
preguntarle
qué
le
llevo
a
cambiar,
cómo
empezó
a
hacerlo
y
que
sensaciones
tuvo
en
el
proceso.
Algunos
de
esos
detalles
ya
los
hemos
avanzado
en
el
apartado
anterior,
pero
ahora
los
detallaremos
más
en
profundidad.
Muy
amablemente
nos
respondió
a
las
citadas
preguntas
para
que
otras
personas
que
estén
en
un
momento
físico
malo
y
crean
que
es
imposible
mejorar
su
forma
o
perder
peso
vean
que
es
posible.
A
lo
largo
del
artículo
has
podido
ver
publicaciones
de
su
Instagram,
pero
si
quieres
ver
cómo
fue
su
camino,
y
lo
que
va
consiguiendo
y
detalles
y
trucos
sobre
las
carreras
de
obstáculos,
puedes
seguirle
en
este
enlace.
Antonio,
¿qué
te
llevó
a
cambiar?
Antonio
antes
de
comenzar
su
cambio
(izquierda)
versus
Antonio
en
uno
de
los
obstáculos
de
su
última
carrera
–
Imágenes
cedidas
por
Antonio
Rubio
El
miedo.
Siempre
digo
que
el
miedo
es
el
sentimiento
más
poderoso,
porque
nos
obliga
a
hacer
cosas
que
no
creíamos
posibles.
En
mi
caso,
me
hizo
cambiar
por
completo
mis
hábitos
autodestructivos.
Llevo
15
años
con
mi
chica,
y
desde
siempre
vivió
en
un
3º
sin
ascensor
y
fueron
precisamente
esas
escaleras
las
que
me
ayudaron
a
darme
cuenta
del
problema
que
tenía.
Si
con
apenas
20
años
me
fatigaba
al
subir
esas
escalera,
¿Qué
iba
a
pasar
cuando
tuviera
30?
y
¿40?
Quería
ser
padre
joven,
pero
¿iba
a
poder
jugar
con
mi
hijo
el
día
de
mañana?
Eso
fue
lo
que
hizo
clic
en
mi
cabeza.
¿Cómo
empezaste
a
entrenar?
Aunque
esporádicamente
había
hecho
baloncesto,
empecé
a
entrenar
con
un
amigo.
Salíamos
a
correr
un
par
de
veces
a
la
semana
y
una
vez
a
nadar.
Además
de
probar
todos
los
videos
de
HIIT
y
cardio
de
YouTube.
Pero
yo
notaba
que
eso
no
terminaba
de
cuajar.
Así
es
que
empecé
a
formarme
en
el
mundo
del
entrenamiento.
No
disponia
de
mucho
tiempo
a
diario,
porque
estaba
en
la
universidad,
así
es
que
quería
ser
lo
más
eficiente
posible.
Me
compré
unas
pesas
y
empecé
a
meter
algo
de
entrenos
de
fuerza
combinados
con
ejercicios
con
mi
cuerpo
de
alta
intensidad.
Pisamos
el
acelerador.
Casualidades
de
la
vida,
llegó
una
carrera
de
obstáculos
a
mi
ciudad
[Mérida]
y
un
amigo
consiguió
engañarme
para
que
nos
apuntáramos.
Estaba
inmerso
en
mi
cambio
y
aunque
lo
dudé
mucho,
terminé
por
apuntarme.
En
los
dos
meses
que
quedaban
hasta
la
carrera
perdí
7-10
kg.
Poniéndome
en
la
línea
de
salida
con
105
kg,
15
kg
menos
que
cuando
sonó «el
clic»
en
mi
cabeza.
Y
lo
más
importante,
mejor
repartidos,
tenía
más
músculo
que
cuando
empecé,
así
es
que
eran
kilos
de «mejor
calidad».
En
la
carrera
tuvieron
que
ayudarme
a
superar
varios
obstáculos,
pero
la
sensación
fue
tan
buena,
que
me
enganché.
Vi
que
había
sido
capaz
de
muchas
más
cosas
de
las
que
creía
que
podría
hacer,
que
mi
límite
estaba
mucho
más
allá
de
lo
que
creía.
Así
es
que
me
apunté
a
otra
edición
que
había
de
esa
carrera
pero
a
final
de
año.
¿Nos
podrías
hacer
un
popurrí
de
las
sensaciones,
entrenamientos,
cambios
de
dieta…
del
proceso
de
pérdida
de
peso
y
mejora
de
la
forma
física?
Mentiría
si
dijera
que
el
proceso
no
fue
largo,
pero
me
fui
enamorando
de
ese
proceso.
De
cómo
iba
consiguiendo
hacer
cosas
que
parecían
imposibles.
Ser
capaz
de
colgarme
y
soportar
mi
peso,
correr
10km
sin
tener
que
parar,
moverme
más
ágilmente
en
los
ejercicios
de
suelo…
Y
aunque
la
estética
nunca
fue
el
fin,
me
gustaban
los
cambios
que
iba
viendo
en
mi
cuerpo.
La
pregunta
recurrente
¿Qué
dieta
hiciste?
Ninguna
y
todas.
Probé
muchas
dietas
antes
y
todas
terminaron
fracasando,
porque
no
era
capaz
de
mantenerlas
en
el
tiempo.
Así
es
que
hice
mi
propia
dieta,
quizás
enfocada
un
poco
como
una
mezcla
entre «real
food»
y «low
carb»
pero
la
realidad
es
que
empecé
a
comer
mejor.
Menos
pan
blanco,
menos
salsas,
menos «alimentos»
ultra
procesados…
Y
más
carne,
más
huevos,
más
verdura.
Pero
sobre
todo,
mejoré
mi
relación
con
la
comida.
Entendí
lo
que
era
comer
con
hambre
y
lo
que
era
comer
por
ansiedad,
por
aburrimiento
o
por
cualquier
otra
emoción…
Esta
relación
se
fortaleció
cuando
dos
años
después
de
haber
empezado
a
entrenar
empecé
a
probar
el
ayuno
intermitente.
Lo
que
fue
una
estrategia
o
un
entrenamiento
nutricional
de
cara
mi
primera
carrera
de
larga
distancia,
se
convirtió
en
un
hábito
que
a
día
de
hoy
perdura.
Muchas
gracias
por
toda
la
información,
Antonio.
Conclusiones
de
la
historia
de
superación
de
Antonio
Rubio
Casi
siempre
nos
centramos
en
el
antes
y
el
después,
pero
no
miramos
profundamente
el ‘durante’.
En
los
procesos
de
cambio
físico
siempre
hay
un
denominador
común:
un
momento ‘clic’.
En
el
caso
de
Antonio
Rubio
ese
momento
llegó
cuando
día
tras
día
veía
que
estaba
limitado
con
20
años
por
su
peso
y
estado
de
forma,
y
se
visualizó
con
40
años.
En
esos
momentos
comienza
la
toma
de
acción,
ya
sea
salir
a
caminar,
ir
al
gimnasio,
comer
mejor…
Una
vez
que
el
cambio
de
mentalidad
está
hecho,
solamente
hace
encontrar
un
ejercicio
físico
que
nos
motive
y
esperar
lo
inevitable.
Las
carreras
de
obstáculos
son
una
disciplina
espectacular
por
su
motivación
hacia
la
mejora
de
tiempos,
conseguir
retos
nuevos
y
sentirse
cada
vez
más
libre.
Además,
este
tipo
de
deporte
requiere
entrenamientos
de
fuerza
y
de
resistencia,
la
mezcla
perfecta
para
perder
peso
y
mejorar
la
forma.
Un
dato
a
destacar
de
la
historia
del
corredor
español
es
que
la
estética
no
era
su
objetivo,
ni
de
lejos.
Él
quería
mejorar
su
forma
física
para
evitar
limitaciones
en
su
día
a
día
y
su
enganche
por
las
carreras
de
obstáculos
hizo
que
los
entrenamientos
fuesen
dirigidos
hacia
ello.
El
cambio
físico
llegó
como
un
efecto
secundario,
no
como
una
meta
principal.
Respecto
a
las
dietas,
el
emeritense
no
puede
ser
más
claro:
hice
mi
propia
dieta.
No
existe
una
dieta
universal,
ni
es
buena
opción
cambiar
radicalmente
de
estilo
de
alimentación.
Lo
ideal
es
buscar
poco
a
poco
qué
nos
gusta
más
y
qué
menos,
y
encontrar
estrategias
como
el
ayuno
intermitente
que
puede
ser
lo
que
mejor
nos
encaje.
Los
principios
nunca
son
fáciles,
que
se
lo
digan
a
Antonio
cuando
salió
a
correr
con
105
kilos
de
peso,
pero
son
necesarios.
Todo
final
tiene
un
principio,
y
cuando
antes
esté
dado
ese
paso,
antes
se
abrirá
paso
el
camino.
Tendrá
muchos
obstáculos,
eso
sí,
Antonio
Rubio,
tú
y
yo
lo
sabemos,
pero
aunque
no
lleguemos
al
gran
nivel
del
extremeño,
siempre
podremos
desafiar
a
nuestro
yo
de
ayer.
Instagram
de
Antonio
Rubio
|
Son
of
Workout
OCR
Imágenes
|
Son
of
Workout
OCR
