En
el
mundo
de
las
plantas,
hay
especies
que
parecen
haber
sido
creadas
no
solo
para
adornar,
sino
para
transformar
cualquier
espacio
en
un
lugar
más
vibrante
y
acogedor.
Una
de
ellas
es
la
Hoya
Carnosa,
conocida
como
la
flor
de
cera.
Esta
suculenta
no
solo
es
fácil
de
cuidar,
sino
que,
con
sus
hojas
gruesas
y
sus
flores
en
forma
de
estrellas,
añade
un
toque
de
frescura
y
elegancia
a
cualquier
rincón.
Aunque
no
es
tan
famosa
como
otras
plantas
de
interior,
su
popularidad
ha
ido
en
aumento
gracias
a
su
resistencia
y
la
belleza
singular
de
sus
flores,
que
parecen
casi
artificiales,
como
hechas
de
cera,
de
ahí
su
nombre.
Lo
interesante
de
la
Hoya
Carnosa
es
que
se
adapta
muy
bien
a
ambientes
de
interior,
por
lo
que
se
convierte
en
la
opción
ideal
para
quienes
no
tienen
mano
en
la
jardinería
pero
desean
llenar
su
hogar
de
vida.
A
diferencia
de
otras
plantas
que
requieren
cuidados
estrictos,
la
Hoya
Carnosa
no
es
exigente,
lo
que
la
hace
perfecta
para
novatos
en
jardinería.
Además,
su
crecimiento
vertical
y
su
capacidad
para
trepar
por
estructuras,
como
enrejados
o
macetas
colgantes,
la
convierten
en
una
buena
opción
para
decorar
desde
estanterías
hasta
ventanas
o
balcones.
Por
supuesto,
no
todo
en
la
vida
de
una
planta
es
tan
sencillo
como
parece.
Aunque
es
una
suculenta
resistente,
la
Hoya
Carnosa
tiene
sus
peculiaridades
y
sus
humildes
necesidades.
No
le
gusta
estar
en
un
entorno
demasiado
frío
ni
recibir
demasiada
agua.
Además,
para
que
florezca
adecuadamente,
necesita
luz
indirecta,
lo
que
implica
que
encontrar
el
lugar
perfecto
dentro
de
la
casa
puede
ser
un
pequeño
reto.
Pero
lo
bueno
es
que,
una
vez
encuentras
ese
rincón
ideal,
la
Hoya
Carnosa
no
solo
crecerá,
sino
que
sorprenderá
con
sus
flores
aromáticas
que
florecen
en
racimos
y
tienen
una
fragancia
delicada
y
dulce,
como
un
pequeño
milagro
de
la
naturaleza.
crear
un
huerto
urbano
Sin
sol
directo
Una
buena
noticia
para
quienes
desean
tenerla
en
la
cocina
es
que
no
le
gustan
los
rayos
directos
del
sol,
ya
que
estos
pueden
quemar
sus
hojas.
Es
por
esto
que
una
ventana
protegida
por
cortinas
o
un
lugar
iluminado
pero
sombreado
es
ideal.
Si
la
planta
empieza
a
perder
sus
hojas
o
se
ve
marchita,
es
señal
de
que
algo
no
está
funcionando
bien
en
cuanto
a
la
luz
que
recibe.
Por
eso,
cambiarla
de
sitio
a
menudo
puede
ser
la
solución
a
muchos
problemas.
Otro
de
los
aspectos
más
importantes
es
el
riego.
Como
toda
suculenta,
la
Hoya
Carnosa
tiene
una
alta
tolerancia
a
la
sequía,
por
lo
que
el
exceso
de
agua
es
su
peor
enemigo.
De
hecho,
regar
una
vez
cada
dos
semanas
es
suficiente,
aunque
en
los
meses
más
cálidos
podría
necesitar
algo
más.Foto
|
Agnese
Lunecka
En
DAP
|
La
trepadora
resistente
que
es
ideal
para
tener
un
jardín
vertical
en
casa
En
DAP
|
Las
plantas
decorativas
ideales
para
pequeñas
terrazas
urbanas
(y
no
son
cactus
ni
suculentas)