Cada año surgen nuevas formas de lavarse el pelo, que hacen que las que usamos el champú y después el acondicionador nos hayamos convertido en clásicas. De los creadores del No Poo y del Cowashing llega ahora el lavado inverso, que consiste en cambiar el orden de los productos: primero la hidratación y después la limpieza.
Qué es el lavado inverso de pelo
El lavado inverso consiste en utilizar primero el acondicionador, con el cabello húmedo de medios a puntas y dejándolo actuar durante unos minutos. Igual que lo usaríamos en el método de limpieza de cabello tradicional. Pero al enjuagarlo se aplica el champú, eliminando por completo los restos de suciedad y acondicionador.
Se recomienda utilizar en cabellos finos y melenas con tendencia grasa, porque asegura una limpieza más en profundidad y más volumen al eliminar los restos de acondicionador. El objetivo es dejar el pelo libre de todos los residuos que apelmazan el pelo, pero ¿de verdad funciona?
El error de confundir acondicionador con mascarillas pre-lavado
Hemos planteado esta cuestión al director de Maison Eduardo Sánchez, experto en peluquería. Él nos confirma que el orden establecido está por algo y recomienda utilizar el acondicionador después del champú como hemos hecho siempre. De lo contrario se eliminan sus beneficios:
«Yo recomiendo seguir aplicándolo en el sentido habitual y sí hacer este lavado inverso en el caso de mascarillas y aceites cuya acción es más profunda.»
Mejor con productos pre-lavado sobre el pelo seco
Desde Maison Eduardo Sánchez nos cuentan que este procedimiento inverso no es algo nuevo y muchas firmas lo han incorporado a sus protocolos y rituales desde siempre. Sin embargo, lo hacen con productos pre-lavado como aceites y mascarillas y siempre recomiendan hacerlo en seco.
«Aplicar mascarillas o aceites en seco tiene la clara ventaja de que el cabello absorberá mejor los tratamientos que se apliquen. Cuando está húmedo, el agua impide que penetre en la fibra capilar y no tiene una acción tan profunda.»
María Roberts de Studio25 también confirma este método y su eficacia sobre pelo seco. «A lo sumo pulverizo el cabello de medios a puntas con un poco de agua y pongo la mascarilla», pero no sobre el pelo empapado en la ducha. Ella utiliza esta hidratación pre-lavado de forma intensiva, dejándola absorber durante 40 minutos para después lavar con champú las raíces.
