En el barrio de Almeda en Cornellá de Llobregat se ha rehabilitado un espacio que ha pasado de industrial a convertirse en una vivienda muy confortable. Ocupa los 105 metros cuadrados y toda una primera planta del edificio. El confort se ha conseguido con control domótico y solar, aislamiento de celulosa e instalación de cerramientos ¿Lo vemos? es muy probable que inspire tu próxima reforma
La finalidad del proyecto en un espacio industrial era transformarlo en un lugar habitable, con estancias amplias, donde se aprovechase al máximo la luz natural y la buena ventilación. Una reforma convencional destina a una familia con dos hijos de hasta nueve años, con la necesidad de tener un espacio amoldable para los próximos diez o quince años siguientes.
En el proyecto destacan las oberturas en fachada y los cerramientos de huecos en forjados que la comunicaban con la planta baja del edificio. Hubo que intervenir en el cerramiento de de huecos de ventanas, reforzar el aislamiento térmico y acústico y modificar algunas instalaciones comunitarias.
Otras de sus peculiaridades ha consistido en cambiar el uso industrial por el urbano entre otros trámites administrativos, de los cuales se hizo encargada la empresa Sincro, que a su vez, ha trabajado en la decoración y dispuesto el mobiliario interior. En la zona de día los sofás modulares de la firma Gamamobel participan activamente con facilidad de movimiento. En el techo y con dos soportes soldados al techo de forma original cuelgan enganches para modificar la sala con columpios, hamacas y hasta accesorios deportivos.
Uno de los muebles favoritos es el de televisión que ofrece gran capacidad de almacenaje, en él, se puede ocultar parte del mismo e inclusive la televisión y darle otro cariz diferente al espacio sólo con correr de un lado a otro el panel corredero. Además hay que recordar que ha sido revestido con el mismo material del pavimento. En el mismo lugar confluyen la cocina y el comedor (de nuevo las zonas abiertas ganan el pulso decorativo).
La reconversión al nuevo hábitat incluye detalles industriales con el uso de chapa de hierro negro en varios puntos como sucede tras los listones de separación, en los que se ha generado una barra de comida informal junto a la cocina. De color blanco y líneas puras y sencillas, de corte moderno y atemporal. La cocina es uno de los espacios en los que se disfruta de la luz natural y consigue hacerla más amplia y combina perfectamente con la zona de día.
El antes y después del local y su planimetría nos hace tomar conciencia de donde nos situamos y cuál es el proyecto adaptado para esta vivienda. En la que la habitación principal queda en el ala izquierda, mientras la zona común separa las habitaciones infantiles distribuidas en el margen derecho con unos 12 metros cuadrados cada una. Unas habitaciones pensadas para cumplir todos los requisitos que un niño y posteriormente de un adolescente que necesitará en su espacio privado.
Estamos acostumbrados a ver viviendas construidas con mayor número de metros en los dormitorios principales, en esta casa es al contrario, el dormitorio principal presenta un tamaño más reducido y se equilibra con un vestidor independiente y otro armario auxiliar donde a pocos metros encontramos un amplio baño revestido con cerámica de Mirage, mampara de ducha de la firma Lasser y lavabos e inodoro-bidé AquaClean de Geberit. El color más utilizado en la vivienda es el color blanco en revestimientos, mobiliarios y cocina, un color elegante, con efecto de amplitud en zonas que no tienen ventanas. El material laminado en blanco es mate y laminado de imitación madera oscura. Un mobiliario a medida realizado por la firma Tegar Mobel.
En este proyecto la zona de lavandería queda reservada dentro de un armario de puertas plegables, un detalle que cuenta dentro de la organización y el estilo minimalista que presenta en general. Los grandes ventanales cuentan con un sistema de control solar y vidrios que dejan pasar la luz al distribuidor y al baño, son las que menos luz perciben del exterior.
Nos encantan las puertas correderas empotradas, sin tapajuntas y con zócalos enrasados al nivel de la pared, todo ello estudiado para evitar los resaltos o distintos niveles de la planta. La pureza en las líneas del diseño es uno de los grandes atractivos de esta vivienda en Almeda y pura es su limpieza al usarse para cubrir paredes una pintura resistente al agua para un mejor mantenimiento.
El sistema domótico empleado es Z-Wave que regula la iluminación y controla el consumo así como, establece un ajuste adecuado a cada necesidad del día o la noche. Lo mismo ocurre con la temperatura, se puede segmentar por zonas o programar desde fuera de la vivienda gracias al sistema inteligente Airzone.
Se ha jugado con un pavimento sintético de poco y fácil mantenimiento, es la lama grande de la firma Parador, en las habitaciones los revestimientos son de Vescom y Saint Honoré, la carpintería de aluminio de la firma K-line y las cortinas y screens de Serveis Téxtils.
No podían faltar detalles y mobiliarios auxiliares de Kave Home, frontales en la cocina de de Neolith y electrodomésticos de Bosch, Franke y Neff para esta preciosa y habitable vivienda familiar ¿Qué es lo que más te gusta de ella? bajo mi opinión, hasta el pasillo tiene feeling.
Fotos | Sincro