La película navideña es un género, aunque no exclusivamente cerrado a la fantasía o lo familiar, que son los primeros términos que vienen a la mente. Puede ser también una excusa para el canalleo o también algo que despierte aspectos realmente tristes. O, para algunos, las dos cosas, como es el caso de Shane Black, que ha hecho de la película navideña un arte tanto como la comedia de acción.
El cineasta es un imprescindible del género de acción por su manera de volver a elementos que, aunque se repitan, pocos hacen tan bien como él. Las parejas improbables de protagonistas, la ambientación navideña, el humor incorrecto, los problemas psicológicos o la presencia de niños son constantes que maneja como nadie. Y todo ello está en una de sus mejores películas, ‘Dos buenos tipos‘.
Gente maja
La película, escrita y dirigida por Black, ya se encuentra disponible en Amazon Prime Video justo a tiempo para las señaladas fiestas. Ocasión perfecta para que mucha más gente descubra una divertidísima joya que no tuvo demasiado éxito en cines, aunque sea una comedia de acción fabulosa a la antigua usanza, con un Ryan Gosling rompiendo todos los prejuicios contra él como estrella y un Russell Crowe gustándose en su bruto antihéroe.
La acción tiene lugar en la Los Ángeles de los setenta, con Gosling haciendo de un detective privado bastante pringado y desafortunado y con Crowe como matón a sueldo implacable. Ambos forman una de esas parejas a la fuerza que generan una química especial durante el trayecto de la película, donde deben investigar la desaparición de una joven, la muerte de una actriz porno y la gran conspiración detrás de ambos casos.
Black asegura que le gusta ambientar sus películas en Navidad para mostrar otra cara diferente de la misma, ya que para mucha gente estas fiestas no son sinónimo de familia o regocijo. Muchos las viven en solitario, o aislados por determinados traumas, y por eso les da una película divertida donde pueden verse reflejados. ‘Dos buenos tipos’ cumple con el molde haciendo bien todas las cosas que se esperan de ella.
‘Dos buenos tipos’: fiestas no aptas para toda la familia
Situaciones idas de madre, momentos de acción violenta, diálogos afilados lanzados con todo el veneno posible y un inusitado placer en hacer todo tipo de perrerías a Gosling y su personaje. El toque personal de Black le da un carisma diferente a cada gag, a cada acercamiento al thriller policial o incluso al noir, retorciéndolos para crear un entretenimiento totalmente fresco y necesario en un panorama cada vez más uniforme.
Por desgracia, se quedó sin ocasión de hacer más réplicas ingeniosas. La decepción comercial derivada de una taquilla de 62 millones de dólares en todo el mundo ante un presupuesto de 50 millones impidió una prometedora secuela que todos los involucrados estaban deseando hacer. Le toca conformarse con ser un clásico de culto moderno que siempre viene bien rescatar.
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