Perder
grasa
y
ganar
masa
muscular
a
la
vez
es
la
piedra
filosofal
que
cualquier
persona
busca
para
mejorar
su
composición
corporal.
Con
el
tiempo
nos
damos
cuenta
de
que
lo
óptimo
es
centrarnos
en
uno
y
luego
en
el
otro.
La
duda
llega
cuando
tenemos
que
elegir
qué
hacer
primero:
perder
grasa
o
ganar
músculo.
Los
principiantes
en
el
entrenamiento
de
fuerza
sí
pueden
perder
grasa
y
ganar
masa
muscular
a
la
vez
durante
un
tiempo
limitado.
También
algunos
casos
excepcionales
dotados
de
una
genética
envidiable.
Sin
embargo,
lo
normal
es
que
se
alternen
procesos
de
pérdida
de
grasa
con
otros
periodos
de
hipertrofia.
Razones
para
perder
grasa
primero
y
ganar
masa
muscular
después
Necesitamos
menos
tiempo
para
perder
grasa
que
para
construir
masa
muscular
En
función
de
tu
porcentaje
graso
se
recomienda
perder
más
o
menos
peso
por
semana.
Un
abanico
entre
medio
kilo
y
un
kilo
de
peso
suele
ser
la
recomendación
general,
variando
dependiendo
de
nuestro
peso
inicial.
Como
resultado
podemos
perder
entre
dos
y
cuatro
kilos
al
mes.
Para
ganar
esos
kilos
de
masa
muscular
necesitaremos
mucho
más
tiempo.
Aumentar
la
masa
muscular
es
más «fácil»
si
partimos
de
un
porcentaje
graso
bajo
Nuestro
cuerpo
cuenta
con
un
entorno
más
adecuado
para
construir
masa
muscular
si
el
porcentaje
de
grasa
corporal
es
bajo.
Algunos
autores
recomiendan
no
exceder
de
un
18%
de
grasa
en
hombres
y
un
28%
en
mujeres
ya
que
puede
verse
disminuida
la
eficacia
de
nuestro
sistema
para
desarrollar
masa
muscular.
La
explicación
se
corresponde
con
el
entorno
hormonal
y
metabólico
que
difiere
de
sujetos
con
porcentajes
atléticos
de
grasa
corporal
a
aquellos
con
exceso
de
grasa.
Aún
entrenando
y
comiendo
lo
mismo,
el
cuerpo
responderá
con
mayor
eficiencia
si
esos
niveles
grasos
no
son
elevados.
Esteremos
más
motivados
si
nos
vemos
mejor
en
el
espejo
Por
el
simple
hecho
de
perder
grasa
nos
veremos
más
grandes,
a
pesar
de
tener
la
misma
masa
muscular
que
cuando
estábamos
más
tapados.
Si
somos
capaces
de
perder
primero
suficiente
grasa
para
vernos
bien
en
el
espejo
e
ir
aumentando
el
peso
de
forma
controlada
después,
tendremos
mucho
ganado.
Por
el
contrario,
si
comenzamos
tapados
nos
veremos
peor
y
en
poco
tiempo
pensaremos
en
cambiar
el
volumen
por
la
definición.
Para
evitarlo,
podemos
solucionar
ese
problema
antes
de
que
aparezca
y
estar
así
más
tiempo
en
volumen.
Al
vernos
con
poca
grasa
sabremos
realmente
cuál
es
nuestro
estado
muscular
En
muchos
casos
se
puede
observar
a
personas
grandes
que
parecen
contar
con
una
buena
base
muscular,
pero
que
tras
una
etapa
de
pérdida
de
grasa
bajan
muchos
más
kilos
de
los
que
suponían.
Una
vez
estemos
en
ese
punto
bajo
de
grasa
podemos
elaborar
un
plan
de
aumento
de
masa
muscular,
sabiendo
realmente
desde
dónde
partimos.
Todo
lo
anterior
solamente
se
aplica
si
tenemos
exceso
de
grasa
En
algunos
casos
hay
personas
muy
delgadas
y
con
poca
grasa
que
quieren
perder
ese «michelín»,
pero
que
ya
cuentan
con
niveles
bajos
de
grasa.
En
esos
escenarios
lo
recomendable
es
iniciar
directamente
con
una
etapa
larga
de
volumen
controlado,
para
evitar
llegar
muy
rápido
a
niveles
altos
de
grasa.
Durante
la
etapa
de
volumen
siempre
vamos
a
acumular
grasa.
Lo
importante
es
que
aumentemos
la
máxima
cantidad
de
masa
muscular
posible
con
la
mínima
ganancia
de
grasa.
De
esa
forma
son
veremos
bien
en
el
espejo,
nuestro
entorno
metabólico
será
nuestro
aliado,
sabremos
cuál
es
nuestro
estado
muscular
y
la
etapa
posterior
de
pérdida
de
grasa
será
más
corta.
En
Vitónica
|
La
guía
para
perder
grasa
de
una
vez
y
por
todas:
estas
son
todas
las
variables
a
tener
en
cuenta
Imágenes
|
Valery
Sysoev
(Unplash)