En
el
marco
de
una
operación
llevada
a
cabo
por
la
Policía
Nacional
la
semana
pasada,
se
ha
logrado
desarticular
un
grupo
criminal
en
Valencia
que
había
estafado
cerca
de
200.000
euros
mediante
técnicas
de
skimming
y
phishing.
Y
todo
comenzó
cuando
las
autoridades
detectaron
una
serie
de
ataques
a
cajeros
automáticos
de
entidades
bancarias
nacionales.
Estos
ataques
se
habían
llevado
a
cabo
mediante
la
instalación
de
dispositivos
tipo ‘skimmer’,
que
permiten
copiar
los
datos
almacenados
en
las
bandas
magnéticas
de
las
tarjetas
bancarias.
Los
estafadores
también
empleaban
microcámaras
ocultas
para
capturar
los
PIN
de
los
usuarios
mientras
realizaban
transacciones,
lo
que
les
permitía
clonar
las
tarjetas
y
realizar
transferencias
fraudulentas.
Además,
descubrieron
que
los
responsables
de
estos
ataques
también
recurrían
a
técnicas
de
ingeniería
social
como
el
phishing,
para
hacerse
con
datos
de
carácter
personal
mediante
el
envío
de
e-mails
y
llamadas
fraudulentos,
y
creación
de
perfiles
y
webs
falsas
encaminadas
a
la
averiguación
de
claves
de
acceso
a
la
banca
online,
documentos
de
identidad
y
otras
contraseñas
que
les
permitían
suplantar
la
identidad
de
sus
víctimas.
Las
pesquisas
policiales
condujeron
a
la
identificación
de
los
miembros
del
grupo
criminal,
y
tras
localizar
las
viviendas
de
los
sospechosos,
se
realizaron
tres
registros
domiciliarios
simultáneos
que
resultaron
en
la
incautación
de
una
gran
cantidad
de
material
informático
y
electrónico.
La
operación
culminó
con
la
detención
de
los
tres
integrantes
del
grupo,
dos
de
los
cuales
han
sido
puestos
en
prisión
provisional.
Sin
embargo,
la
investigación
sigue
abierta
y
no
se
descartan
más
detenciones.
NO
TE
ENGAÑEN!
Los
principales
TIMOS
en
COMPRAS
ONLINE
y
CÓMO
EVITARLOS
Dos
técnicas
de
fraude
tecnológico
diferentes
El
skimming
es
una
técnica
de
fraude
que
implica
la
utilización
de
dispositivos
físicos
diseñados
para
imitar
partes
de
un
cajero
automático.
Estos
dispositivos
contienen
en
su
interior
electrónica
capaz
de
copiar
y
almacenar
los
datos
de
las
bandas
magnéticas
de
las
tarjetas
bancarias.
Una
vez
obtenidos
estos
datos
y
grabado
el
PIN
del
usuario
mediante
microcámaras,
los
delincuentes
pueden
clonar
las
tarjetas
y
realizar
transacciones
fraudulentas.
Por
otro
lado,
el
phishing
es
una
modalidad
de
fraude
que
recurre
a
técnicas
de
ingeniería
social:
los
estafadores,
haciéndose
pasar
por
entidades
legítimas,
envían
correos
electrónicos
maliciosos,
mensajes
de
texto
o
realizan
llamadas
telefónicas
para
obtener
información
personal
sensible,
como
credenciales
de
banca
en
línea
o
documentos
de
identidad.
Esta
información
es
utilizada
posteriormente
para
suplantar
la
identidad
de
las
víctimas
y
realizar
operaciones
fraudulentas.
Consejos
para
protegerse
del
skimming
Ante
el
aumento
de
este
tipo
de
fraudes,
especialmente
durante
la
época
estival,
la
Policía
Nacional
ha
emitido
una
serie
de
recomendaciones
para
ayudar
a
los
ciudadanos
a
protegerse:
-
Evitar
cajeros
automáticos
en
la
vía
pública:
Estos
son
más
susceptibles
a
ser
manipulados
por
los
estafadores.
Es
preferible
utilizar
cajeros
ubicados
en
el
interior
de
sucursales
bancarias
o
en
centros
comerciales. -
Cubrir
el
teclado
al
introducir
el
PIN:
Al
realizar
una
transacción,
tanto
en
un
cajero
automático
como
en
un
TPV,
es
recomendable
cubrir
el
teclado
para
evitar
que
posibles
microcámaras
capten
el
número. -
No
perder
de
vista
la
tarjeta:
Es
importante
no
dejar
la
tarjeta
de
crédito
o
débito
en
un
lugar
donde
no
se
pueda
supervisar,
especialmente
en
establecimientos
donde
se
deba
entregar
para
realizar
pagos. -
Revisar
regularmente
los
extractos
bancarios:
Mantener
un
control
sobre
las
transacciones
realizadas
puede
ayudar
a
detectar
a
tiempo
cualquier
operación
no
autorizada.
Vía
|
Min.
del
Interior
Imagen
|
Marcos
Merino
mediante
IA