Revolución energética sí; petróleo, también. A pesar de que la EEUU, la Unión Europea, Japón o China se han marcado ya el objetivo de reducir sus emisiones alejándose de los combustibles fósiles, las grandes potencias petroleras creen que al crudo le queda un largo camino por delante. Así lo acaba de reconocer Haitham al-Ghais, secretario de la organización que los agrupa a nivel mundial, la OPEP. Es más, el directivo no solo ha compartido sus vaticinios; durante una visita a México insistió en que el país todavía tiene capacidad para invertir en refinación.
¿Qué futuro espera la OPEP? Uno con petróleo, por supuesto. Al menos a lo largo de las próximas décadas. Al-Ghais recordó que las previsiones a escala global de la OPEP contemplan tanto un incremento de la población como de la economía mundial, lo que a su vez tendrá un reflejo claro en el consumo de energía.
«Toda esa demanda no se podrá enfrentar solo con una fuente. Se requiere de todas las fuentes energéticas para complementar», reflexionó el secretario general del organismo, según un comunicado de la Secretaría de Energía mexicana.
¿Y qué cifras maneja? No todo son valoraciones, ni buenas palabras. En su informe anual, la OPEP dejaba ya dos vaticinios interesantes: primero, que para mediados de la década de 2040 la población global habrá crecido de los de 8.000 millones de personas actuales a 9.500 millones, cálculos en sintonía con los de la ONU. Segundo, que se prevé que el Producto Interior Bruto global se incremente un promedio del 3% anual hasta 2045, con lo que para para entonces la economía del planeta ya duplicará en tamaño a la registrada hace apenas dos años.
Con esos datos como telón de fondo y calculando que en 2045 la demanda primaria global de energía crecerá un 23%, Al-Ghais espera que la industria petrolera siga jugando un papel clave. Para entonces el organismo calcula que el petróleo representará casi un tercio —un 30%, para ser más precisos— de la mezcla energética. De cumplirse sus vaticinios, a mediados de los años 40 de este siglo la demanda petrolera rondará los 110 millones de barriles diarios (mbd).
¿Qué mensaje ha enviado en México? Hace unos días Al-Ghais visitó la capital del país para participar en la conferencia ‘Mercado Mundial del Petróleo’, una cita que le permitió entrevistarse con el presidente del país, López Obrador, y la secretaria de Energía, Rocío Nahle. También para transmitir un mensaje claro para propios y extraños: el petróleo seguirá jugando un papel relevante durante las próximas décadas y México tiene capacidad para invertir en su refinado.
Al-Ghais insistió en que el país resulta «clave» para la OPEP, felicitó al Gobierno por la inversión en la refinería Olmeca, Dos Bocas —donde Pemex ha aprobado un despliegue millonario— y subrayó la importancia de «asegurar la autosuficiencia» energética. No fueron sus únicas valoraciones allí. Según recoge un comunicado colgado en la web oficial del Ejecutivo, insistió en que «los países productores, incluido México, tienen una tarea muy importante» de cara al futuro.
Con mucho gusto recibimos al secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Haitham Al-Ghais y a sus acompañantes. Es la primera vez que una autoridad representante de países petroleros visita México. Nos entendimos bien, requetebién. pic.twitter.com/Qk2RzS1o84
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) March 9, 2023
¿Qué papel juega México? Según las tablas de Statista, en 2021 México se situaba como el 12º principal productor de petróleo, con un aporte de barriles diarios alejado de los primeros puestos, ocupados por EEUU, Arabia Saudí y Rusia. Lo cierto es que su peso tiene poco que ver hoy con el de hace décadas: el histórico de Enerdata muestra que en 1990 México producía 151 millones de toneladas (Mt) de crudo, lo que lo convertía en el quinto país a escala global. En 2004 rondaba ya los 191 Mt, pero en 2019 y 2020 se mantuvo por debajo de la barrera de los 100.
Petróleos Mexicanos (Pemex), empresa estatal, es hoy una de las petroleras más endeudadas y ha llegado a convertirse en un importador neto de hidrocarburos. El Gobierno ha decidido apostar también por las renovables, con un enorme parque solar en Sonora que exigirá una inversión millonaria. En 2021, coincidiendo con la compra de una planta de Deer Park, en Houston, López Obrador reivindicaba en cualquier caso el sueño petrolero mexicano: «Es el mejor negocio del mundo».
Imagen de portada: México Mágico (Flickr)
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