Jesús María. La Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) eligió 184 delegados en los establecimientos educativos de educación pública del Departamento Colón, durante la semana del 13 al 17 de agosto.
En líneas generales, cada institución podía elegir un delegado/a titular y un/a suplente cada 10 docentes, estén o no afiliados. A su vez, quienes se postularan a delegados/as debían ser afiliados con un año de antigüedad mínima. En los establecimientos de los niveles Medio y Superior y en los colegios para Adultos se permitió la elección de interinos, siempre y cuando estén en el cargo hasta diciembre de este año o febrero de 2019.
Otro “particularidad” fue que en las escuelas de Nivel Primario eligieron titulares y suplentes por turno.
“Dentro de las asociaciones sindicales no está contemplada la posibilidad de tener suplente, pero lo incorporamos al estatuto para garantizar la representación de los compañeros; sabiendo que a veces tenemos actividades pedagógicas que son impostergables, cuando no puede ir el docente titular a una reunión, puede asistir el suplente”, explicó la Secretaria General de Delegación Colón, Cecilia Palacios.
En este Departamento consensuaron que no habría listas de delegados, sino que la elección sería nominal. Los colegios con mayor cantidad de postulantes fueron el IPEM 23, de Unquillo, y el IPEM 333, de Juárez Celman, donde se presentaron 13 candidatos para ocupar tres representaciones.
Terminada la elección, las carpetas de cada establecimiento fueron elevadas al Ministerio de Trabajo para que los nuevos delegados tengan tutela sindical y puedan accionar en sus lugares. La tutela les garantiza que no podrán ser suspendidos ni despedidos y que no podrán modificar sus condiciones de trabajo si no media una resolución judicial al respecto. Permanecerán como tales durante dos años.
“Esto es relativo -aclara Cecilia Palacios-. En la elección anterior hubo 160 electos, pero después hubo algunos que dejaron la función. Es que el delegado escolar es el referente clave en toda institución. Es el que acciona, es el mediador, es el que lleva la información de UEPC y el que nos trae la información de los compañeros para debatirla, analizarla y ver las problemáticas que hay en cada institución. Uno puede querer ser delegado, pero en la práctica, en lo cotidiano, se da cuenta que es algo que no quiere ejercer. No es una cuestión de generar miedo ni reticencia a la posibilidad de ser delegado, pero es una gran responsabilidad”.
Por otro lado, “en el último instructivo se puso en claro, también, que no podrán faltar en forma injustificada tres veces seguidas o cinco alternadas a las asambleas de delegados, porque cesarán en su función”.
En octubre será la elección en las instituciones de gestión privada. “Allí no todos quieren elegir delegado y debemos hacer una concientización previa; por ahora, son pocos los afiliados”, anticipa la Secretaria General de la Delegación Colón.
Distintas realidades.
El contexto en que desarrollan su tarea los docentes varía y en el caso del Departamento Colón hay muchas asimetrías entre la realidad de las escuelas y colegios de Jesús María y Colonia Caroya y el resto. De ahí que las demandas de los delegados cambian según el lugar donde ejercen la docencia.
Cecilia Palacios dice que “en otras zonas hay problemas de infraestructura, en cambio en Jesús María y Colonia Caroya, con el Festival y los municipios, que aportan mucho, eso casi no se ve”.
“Frente a un problema, muchas veces el delegado es el primero que acciona -añade-. Hubo casos en que llegaron a labrar actas de interrupción de servicio porque suelen quedarse sin agua, sin luz, debido a que tienen instalaciones viejas. En 2015 se inundaron. Y hubo delegados que trabajaron hasta conseguir edificios nuevos”.
No todas las demandas son edilicias. Los delegados también receptan muchas consultas por “salarios, licencias, dudas sobre el estatuto, situaciones arbitrarias”.
Sus participaciones son por una problemática muy variada. Cecilia Palacios sostiene que “el delegado que trabaja bien conoce la problemática institucional”. Entre ellas, “hay cuestiones que los docentes necesitan para mejorar sus prácticas pedagógicas y para eso tenemos un instituto con el que damos capacitaciones y hacemos jornadas; inclusive, llevamos espectáculos”.
Y hay otro nivel de preparación de los delegados: el de los encuentros personales con las autoridades gremiales, donde suelen recibir sugerencias de cómo encarar gestiones sin provocar choques innecesarios. “Siempre recomendamos hablar con los directivos para no entorpecer el clima institucional”, concluye la titular de la Delegación Colón.
¿Cuántos delegados/as puede tener un establecimiento?
Si se desempeñan entre 10 y 50 docentes: un/a titular y un/a suplente.
Si se desempeñan entre 51 y 100 docentes: dos titulares y dos suplentes.
Si se desempeñan más de 101 docentes: un/a titular y un/a suplente por cada 100 docentes que superen esa cantidad.
31-08-2018