Stellantis
ha
vivido
dos
grandes
polémicas
en
los
últimos
años
relacionados
con
sus
motores
o
los
sistemas
que
los
hacen
funcionar.
Polémicas
que
han
terminado
por
estallar
en
los
últimos
meses
y
que
está
obligando
a
la
compañía
a
ampliar
sus
garantías
y
dar
mayor
cobertura
a
los
clientes
afectados.
Recientemente
supimos
que
Stellantis
se
comprometía
a
ampliar
la
garantía
de
sus
motores
PureTech
de
forma
retroactiva
y
que
asumiría
los
gastos
de
las
reparaciones
entre
2022
y
2024
siempre
y
cuando
se
cumplieran
algunas
condiciones
como
poder
certificar
que
se
ha
pasado
el
mantenimiento
correctamente.
El
otro
frente
que
el
conglomerado
tiene
abierto
está
relacionado
con
los
fallos
en
los
sistemas
de
AdBlue
de
sus
coches.
Ahora,
la
empresa
se
compromete
a
ampliar
una
cobertura
especial
para
los
coches
de
Peugeot,
Citroën,
DS
Automobiles
y
Opel/Vauxhall
con
motores
diésel
Euro
6.
En
el
caso
de
haber
pagado
esta
cobertura
especial,
ahora
serán
los
clientes
los
que
pueden
solicitar
que
se
les
reintegre
el
dinero.
Los
problemas
con
el
AdBlue
y
la
respuesta
de
Stellantis
En
Europa,
desde
el
201
se
viene
aplicando
la
norma
Euro
6
a
todos
los
coches
homologados
desde
entonces.
Esta
nueva
normativa
de
emisiones
obligó
a
los
fabricantes
a
montar
sistemas
de
SCR
(Selective
Catalytic
Reduction)
para
reducir
el
NOx
(óxido
de
nitrógeno)
expulsado
a
la
atmósfera.
El
sistema
SCR
está
pensado
para
descomponer
parte
de
los
gases
contaminantes
en
nitrógeno
y
vapor
de
agua.
Es,
en
definitiva,
un
catalizador
instalado
en
el
tubo
de
escape.
Dicho
catalizador
funciona
con
AdBlue,
un
producto
en
formato
líquido
que
combina
agua
y
urea
(32,5%)
que
se
inyecta
al
catalizador.
El
propio
calor
producido
por
los
gases
hace
que
se
transforme
en
amoniaco
y
descomponga
esos
mismos
gases.
Para
garantizar
que
los
coches
contaminaban
lo
máximo
posible,
la
Unión
Europea
obligó
a
que
los
fabricantes
incluyeran
el
impedimento
de
arrancar
el
coche
si
el
depósito
carece
de
AdBlue
suficiente
para
garantizar
su
funcionamiento.
Si
el
depósito
se
gasta
con
el
coche
en
marcha,
éste
sigue
funcionando
pero
una
vez
apagado,
no
podremos
volver
a
arrancarlo.
El
problema
con
el
que
se
encontraron
algunos
clientes
de
Stellantis
es
que
se
produjeron
depósitos
defectuosos.
Si
se
daba
este
fallo,
en
algunos
casos
se
pedía
que
se
rellenara
el
depósito
antes
de
tiempo
y
el
coche
seguía
funcionando
pero,
en
otros,
el
coche
entendía
que
se
carecía
del
líquido
y,
por
tanto,
impedía
arrancar
el
coche.
La
única
solución
a
este
problema
pasaba
por
la
sustitución
del
tanque
del
AdBlue,
lo
que
podía
conllevar
un
gasto
de
unos
1.000
euros.
En
diciembre
del
año
pasado,
la
Comisión
Europea
ya
confirmó
un
acuerdo
por
el
que
obligaba
a
Stellantis
a
indemnizar
a
los
usuarios
del
siguiente
modo:
-
El
100%
del
coste
de
las
piezas
en
vehículos
con
hasta
5
años
y
hasta
150.000
kilómetros. -
Entre
el
30%
y
el
90%
del
coste
de
las
piezas
(dependiendo
del
kilometraje)
de
los
coches
entre
5
y
8
años. -
El
coste
de
la
mano
de
obra
asumido
será
de
30
euros,
salvo
que
los
daños
sean
recurrentes,
en
cuyo
caso
asumirá
todos
los
costes
del
taller
autorizado.
La
campaña
comenzó
en
Italia
pero
ahora
se
amplía
el
programa
especial
a
toda
Europa,
incluida
España.
Los
coches
que
reciben
esta
garantía
son
los
fabricados
entre
enero
de
2014
y
agosto
de
2020
cuando
se
cambiaron
los
depósitos
de
AdBlue
que
se
montaban
hasta
entonces
en
los
coches
diésel
de
Stellantis.
Además,
se
especifica
que
los
clientes
que
ya
repararon
su
vehículo
a
partir
de
2021
y
fueran
indemnizados
en
aquel
momento
por
coberturas
ampliadas
que
se
han
venido
aplicando
hasta
ahora
por
esta
problemática,
tendrán
derecho
a
pedir
una
ampliación
del
dinero
reembolsado
teniendo
en
cuenta
estas
nuevas
condiciones.
Quienes
así
lo
deseen,
tendrán
que
solicitar
la
ampliación
de
la
cobertura
de
forma
online
utilizando
este
enlace.
Foto
|
Stellantis