Desde hace tres meses y medio, Estación General Paz se transformó y sus habitantes discuten sobre los beneficios y las desventajas de tener la circunvalación, inaugurada antes de la Navidad por el Gobernador Juan Schiaretti.
La habilitación de esa ruta que rodea la zona urbana sacó el tráfico del viejo trazado de la Ruta 9 Norte, a tal punto que parece un «pueblo fantasma» en la zona céntrica.
Es que ni siquiera los colectivos hacen las mismas frecuencias de antes y eso generó un gran trastorno en la gente.
«Somo un pueblo dormitorio que no tiene poder adquisitivo para movilizarse. Todos nos trasladamos en colectivos y se sigue con frecuencias que no se respetan», dicen los vecinos.
Algunos tienen que irse hasta Bunge para tomar un colectivo a Totoral; otros suben en Córdoba sin saber si el chofer va a entrar al pueblo; los alumnos, en tanto, deben salir a la parada dos horas antes de entrar a clases por si el colectivo pasa fuera del horario establecido.
Los comerciantes que están en la ruta 9 sufren por la caída estrepitosa de las ventas.
Los reclamos vienen desde el mismo diciembre y se intensificaron durante el Festival de Jesús María. Ahora en período de clases, notan que hay maestros que no les conviene ir a General Paz y temen por la baja de la matrícula del secundario y del primario.