El incremento de la tarifa de taxis y remises aún está sin definiciones, pese a que el pedido de los permisionarios ingresó hace más de dos meses a los Concejos Deliberantes de Jesús María y Colonia Caroya.
En el caso de Jesús María, la solicitud implicaba una suba de la bajada de bandera y de la ficha cada cien metros.
Sin embargo, los concejales habían decidido esperar que primero el aumento sea aprobado por el Concejo de Colonia Caroya, cuyo tratamiento requiere de doble lectura y audiencia pública. Pero cuando se convocó a los trabajadores del volante a la audiencia, no se llegó a un acuerdo.
A raíz de esto, y para no seguir dilatando la autorización de la suba, se fijó una reunión de la Mesa de Transporte para el 13 de agosto.
Según confirmó el secretario de Gobierno Municipal, Diego Almada, en esa instancia se consensuará la modificación de la tarifa.
Luego, el proyecto será enviado al Concejo para su aprobación definitiva.
