ACV o Ataque Cerebral: la importancia del tratamiento inmediato

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El accidente cerebro vascular o ataque cerebral es el déficit neurológico súbito que resulta la obstrucción o ruptura de una arteria del cerebro.

Esta enfermedad es la tercera causa de muerte; pero es, además, la primera causa de invalidez en adultos, explica el Dr. Raúl E. Villafañe, neurocirujano y neurocirujano endovascular (MP 16012/6).

Prevención

Si bien los síntomas de la enfermedad son repentinos, las enfermedades de las arterias del cerebro se desarrollan en forma progresiva a lo largo de meses o años.

Con mayor frecuencia, el proceso se produce en quienes tienen condiciones llamadas factores de riesgo vascular. Por lo tanto, los ataques cerebrales pueden prevenirse detectando y controlando la hipertensión arterial, el tabaquismo, la diabetes, el colesterol elevado y las enfermedades cardíacas.

En aquellas personas que ya han sufrido un ataque cerebral y se han recuperado es muy importante, además del control de factores de riesgo, el uso de medicamentos que disminuyan las posibilidades de sufrir nuevos episodios.

Cómo enfrentarlo

El ataque cerebral ocurre con crueldad repentina y, cuando no es fatal, puede consumir reservas físicas, anímicas y financieras del paciente, de su familia y de la comunidad.

Recientemente la investigación médica ha descubierto drogas que pueden revertir el daño, al menos parte. En primer lugar se encuentran las medicaciones que disuelven los coágulos que obstruyen las arterias. Sin embargo, los últimos estudios científicos han demostrado la mayor eficacia de la trombectomía mecánica, es decir, la realización de un cateterismo cerebral, similar a lo que se hace cuando se obstruye una arteria del corazón.

Por lo tanto, es sumamente importante que la persona o sus familiares puedan reconocer en forma rápida los síntomas premonitorios de un ataque cerebral para activar en forma inmediata los servicios de emergencia.

Síntomas de un ataque cerebral

– Debilidad o adormecimiento repentino de la cara, brazo o pierna, usualmente de un lado del cuerpo.

– Aparición brusca de dificultad para hablar, comprender el lenguaje o tragar.

– Pérdida u oscurecimiento visual de aparición súbita en uno o ambos ojos.

– Episodio de visión doble o pérdida del equilibrio o coordinación.

– Dolor de cabeza intenso e inexplicable.

– Mareo, vértigo o pérdida de estabilidad.

– Trastornos de la personalidad de aparición rápida y/o trastornos mentales como olvidos o alteraciones del juicio.

100 mil casos

Según la Asociación Americana del Corazón (USA), en Argentina se dan 100 mil nuevos casos por año.