Colonia Caroya. Un hombre, en un escándaloso estado de ebriedad, fue protagonista de un hecho que pudo terminar peor.
El domingo a las 11, los vecinos de Calle 30 y 40, frente a la bodega Terra Camiare, vieron aun vehículo parado en el medio de la arteria. Adentro, un hombre estaba dormido.
La Policía y los agentes municipales llegaron al lugar, lo despertaron y lo obligaron a correrse a la banquina.
Se trataba de un adulto que estaba borracho y que circulaba desde la zona rural hacia la urbana, pero antes de cruzar la Calle 40 se quedó dormido al volante. Por fortuna, tuvo el reflejo suficiente para detener el coche.
Los inspectores sacaron el alcoholímetro: ¡El registro fue de 3,06 mg por litro de alcohol en sangre! Esa cifra es siete veces más que lo permitido (0,4 mg).
Debieron llamar a un familiar para llevarlo hasta su casa, mientras el automóvil era secuestrado.
27-08-2018