Los
tomates
son
imprescindibles
en
cualquier
cocina,
pero
también
víctimas
de
errores
de
conservación
que
afectan
a
su
sabor
en
la
mayoría
de
los
hogares,
que
tras
cosecharlos
de
su
huerto
o
adquirirlos
en
las
tiendas,
los
ponen
directamente
en
la
nevera.
Ahora
bien,
este
es
un
grave
error
en
la
mayoría
de
los
casos
porque,
aunque
se
desee
degustarlos
frescos,
tiene
una
serie
de
implicaciones
en
este
delicado
producto.
El
tiktoker
especializado
en
agricultura
@lahortetadebussy_
ha
recordado
que
la
nevera
no
siempre
es
el
mejor
destino
para
esta
fruta,
ya
que
con
este
gesto: «Estás
tirando
tu
esfuerzo»
(en
el
supuesto
en
el
que
los
tomates
sean
cultivados
por
ti).
El
frío
interrumpe
el
proceso
de
maduración
natural,
lo
que
impide
que
el
tomate
desarrolle
su
característico
dulzor.
Esa
interrupción
hace
que
el
sabor
se
quede
plano
y
menos
atractivo
al
paladar.
crear
un
huerto
urbano
Textura
arenosa
indeseada
Además,
las
bajas
temperaturas
rompen
las
paredes
celulares
de
esta
fruta,
dando
lugar
a
una
textura
arenosa
que
muchos
han
notado
tras
sacar
un
tomate
de
la
nevera.
Este
cambio
afecta
directamente
a
su
calidad
gastronómica.
Por
otro
lado,
por
debajo
de
los
diez
grados,
la
fruta
reduce
la
producción
de
compuestos
volátiles,
que
son
los
responsables
de
su
aroma
y
sabor.
Es
decir,
el
frío
apaga
literalmente
la
esencia
del
tomate.

En
cambio,
la
forma
correcta
es
mantenerlos
a
temperatura
ambiente
hasta
que
estén
maduros.
Solo
cuando
ya
lo
estén,
pueden
conservarse
en
el
frigorífico
durante
unos
días
para
alargar
su
vida
útil.
Este
mismo
método
se
aplica
a
otras
frutas
como
el
aguacate:
primero
maduran
fuera
y
después
se
refrigeran,
pues
son
climatéricos.
En
ambos
casos,
conviene
sacarlos
del
frío
antes
de
comerlos
para
recuperar
parte
de
su
jugosidad
natural.
Existe
toda
una
retahíla
de
sugerencias
sobre
cómo
conservar
tomates
sin
que
pierdan
sabor,
matizando
siempre
que
el
uso
de
la
nevera
no
está
prohibido,
pero
debe
hacerse
en
el
momento
adecuado.
@lahortetadebussy_Nunca
hagas
esto
con
tus
tomates…
si
lo
haces
estas
tirando
a
la
basura
tu
trabajo
y
esfuerzo.
Refrgierar
el
tomate
es
un
error
que
muchos
cometen.
Y
es
un
fallo
muy
grave.
Ya
que
nos
cargamos
por
completo
el
sabor
y
aroma
de
los
tomates.
#tomate
#frio
#nevera
#error
#conservation
La
clave
está
en
entender
que
el
frío
no
es
un
enemigo
absoluto,
pero
sí
debe
aplicarse
con
criterio.
Respetar
los
tiempos
de
maduración
garantiza
tomates
de
mejor
sabor
frescura.
Y
tampoco
conviene
sacarlos
directamente
de
la
nevera,
cuando
están
maduros,
para
comerlos;
deja
que
se
atemperen
un
poco
para
disfrutarlos
en
su
esplendor.
Fotos
|
Montaje
–
@lahortetadebussy_
En
DAP
|
La
mejor
pasta
de
verano
no
lleva
salsa,
se
hace
con
tomate
crudo
y
cuatro
cosas
más








































