Canapés enrollados para los aperitivos de Navidad: tres recetas fáciles y rápidas (con vídeo incluido)

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Con ayuda de un rodillo estiramos las tres rebanadas de pan de molde y las dejamos del grosor que más nos guste. Sin pasarnos porque si no se resquebrajan al enrollar. Reservamos debajo de un paño húmedo para que no se sequen mientras preparamos los canapés enrollados.

Para el canapé enrollado de pimientos y atún, escurrimos bien los pimiento rojos asados y los secamos con papel absorbente. Escurrimos también el atún, guardando el aceite. Pelamos el diente de ajo. Trituramos todos los ingredientes con una batidora de brazo y salpimentamos al gusto. Podemos ajustar de espesor añadiendo un poco de aceite (el del atún) y dar un punto de sabor con un pellizco de pimentón. Al gusto. Cubrimos una de las rebanadas de pan con una capa fina y enrollamos por la parte más larga. Pinchamos con unos palillos y cortamos piezas de 1 cm de grosor aproximadamente.

Para el enrollado de pesto, mozzarella y tomate seco, cortamos los tomates secos en finas tiras. Untamos la rebanada de pan con una capa fina de pesto, sin pasarnos (tiene un sabor muy potente), y colocamos encima las lonchas de mozzarella y el tomate seco. Enrollamos por la parte más larga. Pinchamos con unos palillos y cortamos piezas de 1 cm de grosor aproximadamente.

Para el enrollado de huevo y gambas, picamos finamente el huevo y las gambas. Mezclamos con la mayonesa y el queso crema y salpimentamos al gusto. Cubrimos la última rebanada de pan con la mezcla, enrollamos por la parte más larga, pinchamos con palillos y cortamos piezas de 1 cm de grosor aproximadamente.

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Con qué acompañar los canapés enrollados

El mejor acompañamiento para estos canapés enrollados es una buena compañía, pero si de «comercio y bebercio» hablamos, entonces busquemos una bebida al gusto del comensal. Ya sea una cerveza bien fresca, un buen vino, una copa de cava, un refresco o, simplemente, agua. Y después del aperitivo, un gran festín.