Chiqui Tapia puso de ejemplo a Mastantuono cuando habló de los juveniles argentinos: «Tiene una altura, un nivel…»

En
lo
que
va
de
la
temporada,


Franco
Mastantuono
se
convirtió
en
la
usina
de
fútbol
que
tiene


River.
Es
el
motor
que
produce
ataques
de
manera
individual
y
hace
jugar
al
equipo.
A
medida
que
avanzan
las
fechas,
lo
del
pibe
se
vuelve
cada
vez
más
impresionante.
Una
calidad
que
deslumbra
tanto
en
el
mundo
River
como
también
puertas
afuera:


Claudio
Tapia,
presidente
de
la
AFA,
lo
puso
de
ejemplo
al
hablar
del
buen
rendimiento
de
los
juveniles
argentinos.

Cuando
habló
del
interés
de
los
clubes
europeos
por
juveniles
argentinos,
el
Chiqui
pensó
en
él.
En
Franco.
En
Mastan.
En
el
pibe
que,
a
sus
17
años,
brilla
en
la
Primera
del
CARP:
«Mastantuono
hoy,
¿no
es
la
figura
de
River?
Y
tiene
17
años.
Podría
haber
ido
a
jugar
el
Sudamericano
Sub
17
y
no
lo
hizo
para
quedarse
a
jugar
en
River.
Pero
tiene
¡17
años!
y
juega
con
una
altura
y
un
nivel…

Yo
creo
que
River
ya
debe
haber
tenido
ofertas
por
este
pibe,
seguramente»,
dijo
en
diálogo
con
Gelatina.

Su
declaración
mientras
contaba
la
regla
que
la
AFA
impuso
para
que
los
clubes
argentinos
cedan
jugadores
y
como
todos
los
equipos
conforman
una
de
las
canteras
de
futbolistas
más
grandes
del
mundo: «En
la
Selección
Argentina
tenemos
obligatoriedad
de
cesión
de
jugadores.
Somos
el
único
país
que
obliga
a
sus
clubes
a
ceder
y
eso
lo
decidimos
después
del
Mundial.

Por
eso
creo
también
que
nuestro
proyecto
de
Selecciones
es
tan
serio.
En
Europa
solamente
te
lo
pueden
dar
cuando
hay
fecha
FIFA,
pero
acá
en
la
Argentina,
las
selecciones
que
entrenan
de
lunes
a
viernes
pueden
tener
a
los
jugadores.
Están
obligados
a
cederlo.
Si
a
ese
jugador
no
te
lo
quieren
ceder,
la
AFA
los
puede
sancionar».

Los
hilos
de
River
en
el
partido
frente
a
Talleres
nuevamente
fueron
tejidos
por
Franco
Mastantuono.
El
pibe
de
17
años
volvió
a
ponerse
el
equipo
al
hombro
y,
con
varios
destellos
de
calidad,
logró
generar
las
jugadas
más
claras
de
un
equipo
al
que
le
costó
producir
juego
en
ataque.
Pero
este
gran
rendimiento
del
nacido
en
Azul
no
solo
se
vio
reflejado
en
las
tantas
jugadas
claras
que
tuvo,
sino
que
también
tuvo
impacto
en
sus
estadísticas,
aspecto
en
el
que
fue
de
los
mejores
de
la
noche
del
Monumental.

En
este
empate
frente
a
la
T,
Mastantuono
lideró
varios
aspectos
importantes
del
juego:
fue
el
jugador
que
más
gambetas
completó
en
todo
el
partido,
con
un
total
de
ocho;
el
que
más
duelos
ganó,
con
13;
el
que
más
veces
tocó
la
pelota,
con
82
toques;
el
que
más
faltas
recibió,
con
cuatro;
y
el
jugador
que
más
veces
pateó
en
todo
el
partido,
con
seis
remates
-dos
fueron
al
arco-.

Analizando
con
más
profundidad
estos
datos,
queda
en
claro
que
el
azuleño
fue
el
que
dirigió
la
batuta
en
los
ataques
del
equipo
de
Gallardo.
Esto
se
ve
claramente
reflejado
en
la
predominancia
que
tuvo
en
toques
de
pelota,
algo
que
muestra
su
incidencia
en
el
juego,
pero
también
en
la
cantidad
de
remates
que
intentó
y
en
sus
gambetas
exitosas,
lo
que
muestra
que
es
un
futbolista
más
que
completo.

Partiendo
desde
el
sector
derecho
hacia
el
medio,
zona
en
la
que
se
lo
ve
más
cómodo
que
pegado
a
la
raya,
el
pibe
de
17
años
tuvo
un
gran
partido
frente
a
la
T.
La
primera
clara
que
tuvo
fue
la
jugada
en
la
que
resolvió
con
un
tremendo
caño
ante
la
marca
de
Blas
Riveros
y
que
terminó
definiendo
cerca
del
segundo
palo
defendido
por
Guido
Herrera.

Sin
embargo,
fue
durante
el
segundo
tiempo
que
el
mediocampista
ofensivo
se
destacó
por
sus
acciones
individuales.
Sobre
el
comienzo,
tuvo
una
jugada
con
un
doble
recorte
en
la
que
dejó
a
dos
marcas
en
el
camino
y
que
terminó
con
una
muy
buena
atajada
del
arquero
Guido
Herrera
en
el
primer
palo.
Pero
esto
no
fue
todo,
ya
que
la
más
clara
de
Mastan
fue
un
remate
en
el
travesaño
que
se
dio
tras
un
gran
cambio
de
ritmo
que
tuvo,
en
el
que
dejó
a
su
marcador
sin
opciones.
Sí
nuevamente
fue
la
clave
en
ataque
de
un
River
al
que
le
cuesta
mucho
convertir,
pero
que
basa
sus
situaciones
en
su
talento.