La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) recuerda a los padres sobre el peligro de que los bebés utilicen cojines (o almohadas) antivuelco o posicionadores de cuna. Estos productos, que se utilizan para que el bebé no cambie de posición mientras duerme, pueden causar asfixia y provocar la muerte.
Los cojines antivuelco o posicionadores están diseñados para bebés de menos de seis meses y cuentan con un cilindro a cada lado (o uno de ellos) para mantener al bebé de costado o de espaldas, o una cuña para levantar la cabeza del bebé. Alertan sobre el riesgo de que el bebé se mueva mientras duerme y se quede atrapado entre los cojines, asfixiándole.
Riesgo de muerte por asfixia
El aviso no es nuevo (la FDA emitió un comunicado avisando de ello en 2010) pero debido a que se han registrado casos de muerte por asfixia relacionada con los posicionadores, siempre conviene recordar las recomendaciones de seguridad para un sueño seguro del lactante.
El gobierno federal informa de que en la mayoría de estos casos, los bebés se asfixiaron al girarse sobre su costado y quedar boca abajo. También ha recibido informes sobre bebés que fueron colocados boca arriba o de lado en posicionadores, pero que más tarde fueron encontrados en otras posiciones peligrosas dentro o junto a estos productos.
Por su parte, la Academia Americana de Pediatría también advierte sobre el uso de este tipo de accesorios antivuelco entre sus recomendaciones para prevenir la muerte súbita del bebé. Los cojines son blandos, se pueden mover de sitio y pueden acabar encima de la cabeza del bebé.
En cuanto a los posicionadores que se venden bajo el reclamo de proteger al bebé contra la muerte súbita, la FDA quiere dejar claro que:
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La FDA nunca ha autorizado un posicionador infantil que afirme prevenir o reducir el riesgo de SMSL. Asimismo, tampoco hay pruebas científicas sólidas que respalden las afirmaciones de tipo médico acerca de los posicionadores para dormir.
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La FDA había aprobado previamente algunos de estos productos para tratar la enfermedad por reflujo gastroesofágico o la plagiocefalia. Sin embargo, debido a que la dependencia supo en 2010 que estos productos presentan un riesgo de asfixia, la FDA requirió entonces que los fabricantes de los posicionadores para dormir aprobados por la FDA presentaran datos que demuestren que los beneficios de los productos superan los riesgos. En 2010, la FDA pidió a los fabricantes que dejaran de comercializar estos productos.
Recomendaciones para un sueño seguro
La FDA recuerda cuatro consejos (dos «nunca» y dos «siempre») que debemos tener muy presentes a la hora de acostar a los bebés a dormir.
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No use nunca posicionadores para dormir. Usar este tipo de productos para que un bebé permanezca recostado sobre su espalda o de lado es peligroso.
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No ponga nunca almohadas, cobijas, sábanas sueltas, edredones ni colchas debajo de un bebé o en la cuna. Estos productos pueden ser peligrosos. Los bebés no necesitan almohadas, y usar ropa adecuada, en lugar de cobijas, puede mantenerlos calientes.
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Mantenga siempre las cunas y las áreas de dormir despejadas. Eso significa que tampoco debe poner nunca objetos blandos o juguetes en las áreas de dormir.
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Coloque siempre al bebé boca arriba por la noche y durante la siesta. Una manera fácil de recordar esto es siguiendo el ABC del sueño seguro: “A solas, Boca arriba y en una Cuna vacía”
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