Buñuelos de viento: la receta clásica

0
346

Empezamos pesando la harina y la levadura, después las tamizamos. En un cazo ponemos el agua, la mantequilla, el pellizco de sal y la cucharadita de azúcar. Lo ponemos al fuego hasta que hierva. Añadimos de golpe la harina, bajamos el fuego y removemos hasta obtener una masa que se despegue de las paredes.

Retiramos del fuego y dejamos templar. Fuera del fuego, vamos añadiendo los huevos de uno en uno, batiendo con unas varillas eléctricas después de añadir cada uno y no agregando el siguiente hasta que el anterior no esté bien disuelto en la masa. Obtendremos una masa lisa y homogénea. Dejamos reposar la masa una media hora.

Calentamos aceite en una sartén y con dos cucharitas de café (lo más pequeñas posible porque la masa crece muchísimo cuando se fríe) vamos formando bolitas que iremos friendo hasta que estén bien doradas. A medida que los buñuelos estén hechos los iremos depositando sobre un plato recubierto con papel cocina, para que absorba el aceite sobrante. Los rebozamos en azúcar y los servimos inmediatamente.

Freír los buñuelos es la parte más «delicada» de esta receta si queremos que nos queden de forma redondeada. Mi truco es untar las cucharas con aceite, así la masa no se pega. Para ello tengo un vaso con aceite en el que voy sumergiendo las cucharillas antes de hacer cada buñuelo, es un poco laborioso pero así quedan perfectos.

Paso A Paso

Paso A Paso