Cada año pasa lo mismo, esperamos con ansia que llegue el verano y cuando el calor golpea con fuerza entonces empezamos a pensar en días más fresquitos y a idear platos fríos con los que paliar las altas temperaturas. Como esta semana se espera que los termómetros alcancen cuotas altísimas, y siendo tan importante hidratarse bien durante estos días, vamos a proponeros 31 bebidas y granizados refrescantes para combatir el calor.
Las posibilidades son tantas y tan variadas, que tendréis una propuesta diferente para cada uno de los días del próximo julio, aunque si estáis ansiosos por empezar a probarlas, con muchas de ellas podréis conseguir deliciosas variaciones incluyendo o cambiando algún ingrediente. Si este es el caso, estaremos encantados de que nos digáis de qué modo habéis tuneado nuestras propuestas, pues también nosotros estamos anhelando combatir la ola de calor.
Granizados
La sola palabra «granizado» provoca una sensación de frescor inmediata, y es que pocas bebidas veraniegas consiguen apagar tan rápidamente nuestra sed. Un granizado es un refresco cuya base principal es el hielo troceado o rallado y que puede ser de sabores variados, aunque los clásicos son el de limón y el de café. Si le añadís una bola de helado a vuestro granizado obtendréis un resultado espectacular y será una deliciosa manera de degustar un postre de lo más refrescante.
Tés helados o fríos
Aunque os propongamos cuatro opciones, cada cual más deliciosa, en realidad los tés fríos admiten cualquier sabor, pues cualquier variedad de té es susceptible de ser empleada como té helado, dependerá de vuestros gustos particulares. Os aconsejamos enfriar el té hasta que alcance la temperatura ambiente antes de hacer té helado, ya que de lo contrario es muy posible que se formen condensados, lo que daría al té un aspecto lechoso así como un sabor ligeramente ácido. El té caliente puede ser vertido sobre un vaso con hielo (si se filtra el sabor no se ve afectado por esta operación). Si usáis vasos altos, lo mejor es utilizar una cucharilla de mango alargado para remover bien el granizado.
Smoothies
Un smoothie (del término inglés smooth, es decir, suave) es un delicioso batido de fruta. Se trata de una bebida cremosa no alcohólica preparada a base de trozos y zumos de fruta, concentrados o congelados, mezclados tradicionalmente con productos lácteos, hielo o helado. Sin embargo, tiene una base líquida pudiendo ser agua, leche o yogurt, hielo y pulpa de fruta. Resulta ideal para el verano pues podemos aprovechar la gran y variada cantidad de fruta que tenemos en esta estación y preparar nuestras propias combinaciones, con un sinfín de posibilidades.
Limonadas
La limonada es la bebida casera de la que casi todos nosotros hemos disfrutado en nuestra infancia. ¿Qué madre no la ha preparado para merendar? Según dicen los expertos, se debe mezclar la misma cantidad en volumen de limón que de azúcar y se debe añadir agua cuatro veces el volumen de limón o de azúcar vertido. Lo cierto es que no hay medidas absolutas y las proporciones cambian según los gustos particulares de los consumidores, a nosotros particularmente nos gusta con poco azúcar.
Clásicos veraniegos
Hay bebidas que, aunque podemos disfrutarlas durante todo el año, constituyen clásicos del verano en casi todas las casas. ¿Quién no ha disfrutado de una deliciosa horchata en una terraza al atardecer, cuando el sol ya se está retirando? Nosotros os invitamos a prepararlas en casa, pues son mucho más fáciles de conseguir de lo que os podéis imaginar. Servidlas si tenéis una cena informal con amigos, o para una merienda en el jardín. Tendréis el éxito asegurado.
Cócteles
No es necesario ser un barman experimentado para disfrutar de un cóctel refrescante, basta con saber las proporciones que deben mezclarse de dos o más bebidas y ni siquiera es necesario que sean alcohólicas, podéis preparar deliciosos combinados con zumos, frutas, miel, leche o crema, especias, etc. También son ingredientes comunes de los cócteles las bebidas carbonatadas o refrescos sin alcohol, la soda y el agua tónica, por tanto podéis preparar cócteles con vuestros hijos (se lo pasarán pipa agitando la coctelera) y servirlos en copas elegantes para una ocasión especial. Cambiad los ingredientes a vuestro antojo para conseguirlo.
