En algún momento me di cuenta de que ya no disfrutaba tanto de las comidas navideñas; me sentaba todo fatal y eso que nunca había banquetes pantagruélicos en casa. La respuesta la tuve poco después: intolerancia a la lactosa. ¡Y fue una liberación! Si en vuestra familia también tenéis que lidiar con ello, con esta selección de recetas de Navidad para intolerantes a la lactosa encontraréis ideas para todos los gustos.
Como ya he comentado en otras ocasiones, la intolerancia a la lactosa es menos grave y más fácil de sobrellevar que la celiaquía, aunque tenemos recetas estupendas para todos. Mi consejo es planificar todo el menú adaptándolo a las necesidades que pueda tener algún comensal, y en nuestro caso es tan sencillo como evitar ingredientes con lactosa en los platos. Además, os recomiendo repasar todo lo que sí y no puede tomar un intolerante.
Algunas consideraciones generales
La intolerancia a la lactosa es algo peculiar en tanto a que no todo el mundo la padece de la misma manera. Es importante conocerse a uno mismo, saber qué nos sienta mal y qué podemos digerir bien, y estar siempre al tanto de todos los ingredientes y productos que entran en casa.
En general los lácteos sientan peor si se toman solos o en grandes cantidades muy de golpe -como un vaso de leche en ayunas-, pero pequeñas cantidades combinadas con otros alimentos suelen tolerarse bien. Mucho mejor si se acompañan de otros productos que nos ayudarán a digerir la lactosa, por ejemplo probióticos o fermentados como yogur natural, kéfir, pan de masa madre, chucrut…
Si nos apasiona el queso recomiendo siempre optar por una selección buena de variedades muy curadas; los de leche de cabra suelen sentar mejor, y también hay productores que ya garantizan que son aptos para intolerantes a la lactosa, como los quesos de Suiza.
También podemos usar productos específicos de las gamas sin lactosa del supermercado, aunque a veces la industria abusa de la moda del sello “sin” y son prescindibles, cuando no poco saludables o de mala calidad gastronómica. Es mucho más fácil planificar un menú completo libre de lactosa, y podemos hacerlo sin tener que renunciar a los sabores más tradicionales de estas fechas.