‘Late Motiv’ encuentra en Bob Pop y sus análisis lo mejor de su temporada 4

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Apodado a sí mismo como la vedette intelectual del programa de Buenafuente, Roberto Enríquez ha convertido a Bob Pop en una de las voces más valoradas de los latenights españoles. Su capacidad para analizar cualquier tipo de circunstancia ha ampliado la postura crítica de un programa que solo tomaba contacto con la actualidad a través del monólogo de inicio o la sección de noticias de Buenafuente.

La sección de Bob Pop suma y sigue temporada tras temporada, habiendo alcanzado este año su punto más álgido. El analista que comenzó desgranando el subtexto de la prensa rosa, ha conseguido posicionarse como el colaborador que te aporta una segunda lectura de lo que sea; lo mismo te relaciona Sálvame con el neoliberalismo más desgarrador que te explica los roles en los que la prensa rosa coloca a las mujeres.

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‘Late Motiv’ lleva cuatro años en antena porque fusiona muy bien el humor con la actualidad y la cultura. Mientras las entrevistas de David Broncano en ‘La Resistencia’ son el show por el show, el programa de Buenafuente equilibra muy bien los invitados que acuden a hacer promosió a su programa. De tal forma que un día te encuentras con Estopa, otro con Christina Rosenvinge presentando su libro y al siguiente con Rosa María Calaf y su crítica de los medios de comunicación.

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El punto crítico que le faltaba a un programa diario

Al igual que existe un balance entre el tipo de invitados que son entrevistados por Andreu, los colaboradores del programa son lo suficientemente diferentes entre sí como para que cada uno tenga un nicho sobre el que trabajar. Raúl Cimas habla de series y entretenimiento en general, Maldonado hace el Maldonado, Berto continúa con su consultorio y Raúl Pérez con las imitaciones.

Y, claro, en mitad de este universo de improvisación y comedia es necesaria una voz que ponga en palabras lo que muchos medios generalistas codifican a un lenguaje más lejano. Si en los primeros programas de 2016 el contenido de Bob Pop se centraba en analizar el trasfondo de la prensa rosa, ahora, sus análisis de la actualidad le han llevado a convertirse en la voz que da cera a las élites desde un canal de pago.

Sentarse semana tras semana a contar lo que otros no se atreven a decir por compromisos corporativos o publicitarios es, ante todo, un acto de generosidad con la audiencia. Tres ejemplos para comprender mejor de lo que hablamos.

«Hay programas que convierten los sucesos en realities» o cómo analizar los magacines matinales más vistos:

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«Preferimos apostar por la queja que por la desilusión», su lectura del auge de la extrema derecha en elecciones:

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«Twitter está desactivando la mayoría de los insultos» o lo que es lo mismo: al normalizarse y evolucionar en ciertas líneas de pensamiento lo que hace 20 años era un insulto, ahora, se convierte en un acto referencial más:

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Pero no hemos sido los únicos que hemos pensado que el balance de esta cuarta temporada podía ser trazado desde la perspectiva de Bob. Justo cuando las líneas de este artículo estaban en proceso, el propio Andreu Buenafuente nos adelantó por la derecha convirtiendo la sección de Bob en un homenaje a su trayectoria. Y es que como bien dice el propio presentador y director del programa «este ha sido su año».

Con ‘Los días ajenos’ en las librerías, un monólogo teatral y ahora un podcast con Jorge Ponce, Bob comienza a extender su voz más allá del late night y las ondas de ‘A Vivir Madrid’. Y ya era hora. Bob Pop triunfa porque es capaz de ver lo que otros ni siquiera intuyen pero, sobre todo, porque sabe cómo traducirlo al lenguaje común sin cortapisas.

Bob

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Y en un contexto donde los titulares de Twitter nos nublan la percepción de la realidad y la precariedad nos da más miedo que la mansión de ‘La maldición de Hill House‘, necesitamos los broches de Bob Pop. El accesorio de sus chaquetas rosas se adapta al discurso de cada programa demostrando que la imagen que nos muestran en un primer momento no siempre es el reflejo de la realidad; suele haber un subtexto.

«Todo es ideología»

Tal y como él mismo sostiene en su entrevista en ‘Otra Vuelta de Tuerka’, «todo es ideología» y su deber como alguien que tiene un hueco en un medio de comunicación nacional es contarte que la revista Hola promueve una sociedad clasista y estamental, o que Ana Rosa hace un reality de sucesos como Marta del Castillo o Julen.

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Y, aunque la cita anterior es cierta, está algo incompleta: Bob Pop no se limita a recitar un discurso y ya está. Sabe explicar desde el origen dónde empieza y termina su línea de pensamiento para desgranarte entre medias el por qué. Así, como si fuese una película de Xavier Dolan, al final de la sección comprendes de dónde venían todas aquellas metáforas y evidencias desmesuradas que no sabías muy bien en qué punto colocar al principio del filme.